martes, 29 de junio de 2010

La edad de los porqués

¿Por qué en un contexto de crecimiento económico general, en la ciudad más rica del país crecen los índices de mortalidad infantil? De 7.3 por mil en 2008 a 8.3 en 2009, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. ¿Por qué este incremento se duplica en el sur de la ciudad? ¿Por qué la tendencia porteña contradice a la nacional?
Posiblemente estos porqués sean algo diferentes de aquellos que preguntamos en nuestra  más tierna infancia. Comparten el componente de absurdo que a uno, de mas grandecito ya, le produce tanta gracia escuchar en los mas pequeñitos. Claro que estos otros no son muy chistosos que digamos. 
Como  en los que a veces uno preguntó de mocosito los porqués adultos pueden tener respuestas evidentes. ¿Por qué no puedo jugar con los pececitos en el arenero? Porque fuera del agua morirían. ¿Por qué en un año, en la Ciudad de Buenos Aires la mortalidad infantil sube 1 punto por mil? La respuesta es obvia. Porque se subejecutan las partidas destinadas  a políticas de salud pública. Porque se avanza de manera deliberada en el vaciamiento de los hospitales públicos.  Porque la promesa de igualar el norte con el sur de la mano de la nenita pobre en Lugano  no era más que una manipulación amarillista. Un uso cínico, humillante y oportunista de la situación de los sectores más vulnerables de la ciudad.