Anoche recibí un mail. No es el primero de la especie que recibo. Si es uno de los pocos que, por casualidad, leo a pesar de su titulo increíblemente poco estimulante. Antecedido por el clásico FW: … Es claro que la persona que me envía un mail de características como este me desconoce profundamente. No es su culpa, claro, pero hay que decirlo. Internet tiene la ventaja del anonimato, la desventaja de acabar diciéndole ciertas cosas al último que le interesaría escucharlas, o leerlas. Mas con la profusion de correos chatarra (muy chatarra) que uno recibe invariablemente. Y que, a menudo, no lee. Claro. Optimo. Le mando esta carta, que yo no escribí ni nadie escribió para mi, a mis amigos y seres queridos. Asi quedo como un duque, o una reina, pensaran . Otra posibilidad es guardar copias de las cartas que escribas a tu compañero/a. En el futuro se las podes mandar a tu segunda mujer o a tu novio nuevo. No te vas a molestar en escribir dos veces lo mismo.
Basta de tanta introducción. Lo voy a transcribir porque me dio bastante risa. El titulo dice “FW: Por las dudas yo pedí y mande!!!! Tengo fe!!”. El primer punto de desencuentro es que yo no tengo fe, al menos no en el sentido en el que se va a desarrollar el texto. Y así sigue: LA PERSONA QUE ME LO ENVIO ESTA TODAVIA ASOMBRADA DE LO OCURRIDO, YA QUE ELLA DICE QUE LO HIZO POR HACERLO Y QUE PIDIO ALGO QUE CREIA CASI IMPOSIBLE DE LOGRAR PROBEMOS.
* Para ti mismo di el nombre de la única persona del sexo opuesto con quien quiera ...s estar (tres veces...)...* Piensa en algo que quieras lograr dentro de la próxima semana y repítelo para ti mismo(a) (seis veces)...
* Piensa en algo que quieras que pase entre tu y la persona especial (que dijiste en el no. 1) y dilo a ti mismo/a (doce veces)...
* Ahora haz un ultimo y final deseo acerca del deseo que escogiste.
* Después de leer esto tienes 1 hora para mandarlo a 15 temas y lo que pediste se te hará realidad en 1 semana.
A la mayor cantidad de gente a quien lo mandes más fuerte se hará tu deseo.
Si tu escoges ignorar esta carta lo contrario del deseo te sucederá,
o esto no sucederá jamás..............
Que tus días estén llenos de logros y tus noches de sueños copia y pega esto en diferentes mensajes.
Por si hace falta comentarlo, no hay minimos esfuerzos en la redacción. Existe de entrada una pelación a una experiencia anterior. Esta apelación es absolutamente anónima. No sabemos quien obtuvo ni que cosa. Sabemos que era uno o una de poca fe (se supone que esto funciona como el lugar en el que me identifico) que supero sus prejuicios para beneficiarse con las bondades de la buena estrella. Superado entonces el escepticismo inicial, probemos.
El primer paso es pensar el nombre de una persona del sexo opuesto, porque este método es a prueba de homosexuales. Además es una y solo una. La fe solo opera sobre monógamos heterosexuales.
Acto seguido hay que pensar en un objetivo semanal. Seis veces. Con precisión de repostería. Si primero hay que pensar en alguna persona y después en un logro, las leyes de la asociación harían suponer que estos dos términos se encontrarían en el planteo del objetivo semanal. Sin embargo, en una demostración pornográfica de redundancia, el paso siguiente consiste en repetir ¡doce veces! el plan monogámico y heterosexual en cuestión.
A continuación hay que hacer un esfuercito más. Un ultimo y final deseo acerca del deseo que escogiste. ¿Eh? ¿Deseo desear tal o cual cosa? No me queda clara la formula. En fin, si nos empeñamos en superar este escollo de la gramática casi que terminamos con esto.
Por último tenemos un plazo estricto, una hora, para compartir con todos la formula mágica. Si lo hacemos, con igual precisión, se cumplirá nuestra aspiración monogámica y heterosexual. La fuerza del deseo, me corrijo, no estaba dada por el resto, la huella, certeza de la presencia del objeto a, sino por la cantidad de mails que uno envíe. Nada involucra tanto al sujeto en lo mas profundo de su ser como el envío desmedido de correo basura. ¡He ahí el elemento que nos faltaba para completar la fórmula lacaniana del deseo! Ahora todo cierra.
Ahora, si cortas la cadena, el deseo (que se supone formule desde el inicio por mi fe tenaz en los cuentitos estos) no se cumple. O peor aún, sucede exactamente lo contrario. Y la persona que me lo envió me conoce tanto que sabe cuanto me aflige despedirme de mis aspiraciones monogámicas y heterosexuales.